El Hibiscus es sin duda una de las plantas más exótica que podrás encontrar gracias a sus preciosas flores en forma de trompeta. Perfecta para el exterior o interior del hogar, con climas cálidos. Se caracteriza por atraer mariposas y colibríes.
Cómo cuidar el Hibiscus
Luz: demanda una exposición de mucha luz. Es recomendable que no reciba sol directo durante las horas más calurosas del día o podría quemar las flores. El sol de la mañana o de la tarde es perfecto.
Riego: mantener el sustrato siempre húmedo, con especial atención a la época de floración. Es una planta muy delicada al exceso de riego. No encharcar la tierra con exceso de agua.
Temperatura: las condiciones idóneas son entre 13ºc y 21ºc. En climas fríos es recomendable cultivarla dentro de casa, y en climas muy cálidos, resguardada del sol.
Sustrato: no es muy exigente en cuanto al suelo, proporciónale sustrato universal rico en nutrientes y será suficiente. Procura solo que el suelo no sea arcilloso porque no tolera bien el encharcamiento y necesita un suelo que drene bien el agua de riego.
Fertilizar: usa un fertilizante para arbustos durante las épocas de crecimiento y floración en primavera.
Poda: se recomienda podar en primavera, en la época de floración, siempre y cuando no haya ninguna helada.
Floración: desde primavera hasta final del verano.
Recuerda que si tienes dudas sobre el cuidado de tus plantas puedes contactar con nuestra experta botánica aquí.